miércoles, 19 de julio de 2017

Baklava de pistachos y limón

¡Buenas! Aquí estamos una semana más, aunque un pelín tarde ya que ayer no pudimos subir la receta. Pero la espera me parece que ha sido buena porque os traemos una baklava para chuparse los dedos. 

Hace meses, cuando preparé los "dofres" con sirope de limón (receta aquí), me sobró bastante sirope y estuve buscando que hacer con ello. Y he encontrado la receta perfecta, pero mientras tanto conservé el sirope en un recipiente hermético de cristal en la nevera. Bueno pues resulta que un día viendo uno de los programas de Gordon Ramsay en Canal Cocina, hizo esta baklava y a mi se me encendió la bombilla. El problema que tuve fue que la masa filo no la venden en ninguno de los supermercados de donde vivo, así que hasta que no fui un día por Mercadona (allí lo encontráis seguro) no he podido ponerme manos a la obra.

Es una receta muy sencilla y que necesita muy pocos ingredientes, lo único un poco especial es las hojas de masa filo. Por otra parte, yo he hecho la mitad de la cantidad que manda la receta original que podéis encontrar en la página de Canal Cocina. No quería que me saliese gigante y además con un solo paquete de masa filo fue suficiente, porque partí las hojas a la mitad y así tuve para unas 20 capas.


INGREDIENTES:
1 paquete de masa filo (unas 8-10 hojas)
150 gr de pistachos sin sal
50 gr. de azúcar
Ralladura de 1 limón
50 gr. de mantequilla derretida
Sirope de limón 



PREPARACIÓN

Comenzamos pelando los pistachos y triturándolos. Les añadimos la ralladura de limón y el azúcar.

Cortamos, si nos hace falta, las hojas de masa filo para que se ajusten a nuestro molde, que si es rectangular nos resultará mucho más cómodo.

Ahora toca la tarea repetitiva. Untamos el fondo del molde con la mantequilla derretida y colocamos la primera capa de masa filo. Espolvoreamos la mezcla de ingredientes secos (una capa finita) y colocamos otra hoja de masa filo. Pintamos con mantequilla y volvemos a empezar. Al final es mantequilla - masa filo - pistachos con limón y azúcar. Así una y otra vez hasta que se nos acaben los ingredientes, terminando con una hoja de masa filo pintada con mantequilla. 

Ya nos queda la parte maaaaaaas difícil de todas, y no va con ironía. Toca cortar la baklava en rectángulos, que es la forma tradicional. Digo que es la más dificil porque la hoja de masa filo impregnada con mantequilla no para de moverse y si la sujetas se  te pega a los dedos. Así que hay que ser muy cuidadoso para intentar no destrozarla.

La metemos unos 15 minutos en el horno precalentado a 180 ºC. No juzguéis mucho el mío porque me despiste y estuvo 18 minutos :S

Cuando sacamos nuestra baklava ya dorada la impregnamos con el sirope para que lo absorba bien y no sea muy seca.

Para hacer el sirope podéis usar la receta que hicimos para acompañar los "dofres" (pincha aquí) o la receta de Gordon Ramsay (pincha aquí). Acordaros de hacer la mitad de las cantidades.

¿Qué os parece? Es una receta muy sencilla y entretenida yo creo.

Ahora toca esperar un poquito para no abrasarnos y poder comernos un trocito, o unos cuantos ;)

Feliz semana, ya estamos a la mitad y no queda nada para disfrutar del finde.


 Muack :)

martes, 11 de julio de 2017

Polos de sandía y kiwi

¡Hola hola! Otro martes veraniego por aquí :)

Aunque he de decir que no estan habiendo unos días muy propios de sol y playa por Asturias, me ha apetecido probar a hacer unos polos de fruta 100%. He probado a hacer polos de Nutella (os dejo aquí la receta), de leche de almendras con chocolate, cuando estaba recuperándome de la operación de anginas el año pasado hice polos de Aquarius de naranja y de Coca-cola y también cuando era peque comía muchos polos de petit-suisse, que me encantaban. Pero nunca los había hecho de fruta, así que ya era hora. Se ven por todos los blogs, por las redes sociales, videos... y yo quiero saber si son tan fabulosos como parecen, así que llegó el día de ponerme manos a la obra y probarlos.

INGREDIENTES:

350 gr. de sandía
150 gr. de kiwi (aprox. 2 unidades)
2-3 cucharaditas de azúcar (opcional)



PREPARACIÓN:

Empezamos cortando en trocitos la sandía y quitándole las pepitas. Os prometo que esta es la parte más dura jajaja. 

Trituramos la sandía, llenamos unos 2/3 los moldes para los polos y lo metemos al congelador hasta que se congele un poco, una hora aproximadamente. Así cuando añadamos la parte del kiwi no se nos fusionaran los colores demasiado y veremos la diferencia entre los sabores.

Ahora pelamos y troceamos los kiwis. Yo procuré quitar la parte central ya que es más dura. Si los kiwis están muy verdes y nos resultan un poquito ácidos podemos añadirles un poco de azúcar, que en mi caso fueron dos cucharaditas.

Sacamos del congelador los polos, le añadimos el tercio restante de kiwi y los volvemos a meter hasta que se congelen por completo, al menos 4 horas más.

Como mis moldes tienen como una tapita que va unida al palo del polo, cuando metí la parte de sandía al congelador lo hice sin esa parte para después poder añadir el kiwi. Como no se congelará como una piedra, después podremos clavar perfectamente el palito.

Una vez que los tenemos listos, calentamos un poco con las manos el molde del polo y lo sacamos. Es el último paso para poder disfrutar de este placer helado, ya que además de ser super sanos están buenísimos, confirmado.

Espero que os guste esta propuesta, pero también podéis utilizar otras frutas, las que más os gusten ;)


¡Feliz martes!

martes, 4 de julio de 2017

Empanada de cecina y queso de cabra

¡Primera receta de julio! Como pasa el tiempo, ¿no? A lo tonto y a lo bobo ya hemos pasado el meridiano del año. Ya hace calorcito y cada vez podemos ir más de excursión, hacer rutas, picnics, vamos mas a la playa, hacemos barbacoas y muchas mas cosas al aire libre. Y que mejor que para estas fechas una receta sencilla y perfecta para llevárnosla a donde sea que vayamos a comer. Las empanadas son muy recurrentes y están buenísimas. 

Hoy os digo como preparé mi primera empanada de cecina y queso de cabra. La he comido muchas veces pero hasta este momento no había hecho esta combinación, aunque si otras, porque ya os digo que para cualquier barbacoa c comida con amigos allí aparezco yo con una o dos empanadas y siempre triunfan. Y lo mejor de todo es que como las preparó yo, con hojaldre del que se compra listo para utilizar en el super, es lo más rápido y sencillo del mundo mundial.

INGREDIENTES:
2 láminas de hojaldre
Cecina
Queso de cabra
Tomate (opcional)
1 huevo

PREPARACIÓN:

Como podéis ver, he puesto que el tomate es opcional. Esto es así porque en mi casa no gusta mucho, pero a quien si le guste queda muy rico, que aunque esta vez no lo llevaba, lo he probado y queda muy jugoso. Por otro lado, utilicé queso de cabra en rulo porque es el que más me gusta y adémas se funde genial en el horno.

Empezamos precalentando el horno a unos 180 ºC antes de comenzar con el montaje.

Para montar la empanada estiramos una lámina de hojaldre y si queremos la cubrimos con rodajas de tomates, eso sí, dejando al menos un centímetro din cubrir por los bordes. Si no ponemos el tomate comenzamos con la cecina. Después ponemos una capa de queso de cabra, yo lo desmenucé en trozos grandes para esparcirlo mejor y le quité el reborde para después no encontrármelo mientras como. Finalmente volvemos a poner otra capa de cecina.

Se que la cecina es un poco fuerte y puede que a alguien no le gusta, pero con jamón serrano tambien queda de cine.

Ahora estiramos la segunda lámina de hojaldre y la ponemos encima del relleno. Unimos los bordes enrollándolos hacia dentro y pellizcándolos un poquito para que no se despeguen en el horneado. Hacemos unos cortes pequeñitos en el hojaldre y pintamos con huevo batido.

Metemos en el horno por unos 20-30 minutos o hasta que veamos que el hojaldre esté dorado. Lo dejamos enfriar antes de comerlo y listo.


Aun sin el tomate quedo jugosa, además de ser super sabrosa. ¿No os dan ganas de ir de excursión y llevaros un poquito? A mi desde luego que si y se que la repetiré pronto ;)


¡Feliz martes!